lunes, 17 de diciembre de 2012

SE ACERCA LA NAVIDAD


Publico este artículo, justo una semana antes de la Nochebuena, que hoy se me ocurre una de las más tristes de todos mi sesenta y seis años de existencia, con la sana intención de dejarles descansar a Vds, de mis reflexiones hasta el próximo año 2013.
 
Decía que este año, la fiesta familiar por excelencia en gran parte de nuestro planeta, se me antoja la más triste desde que tengo uso de razón, pues no recuerdo tamaña cantidad de conciudadanos de nuestro planeta, en circunstancias de pobreza y desprotección como los que veo cada día saliendo de mi casa, o asomándome al televisor.
 
Como muy bien saben los que siguen mis escritos habitualmente, me considero un ateo recalcitrante, no son pues los valores cristianos los que me inducen a reflexionar en estos días sobre una fiesta, de la que dicen se remonta a los albores de la existencia humana, cuando nuestros ancestros mostraban públicamente su júbilo, en el solsticio de invierno, donde terminaba el acortamiento de las horas de luz y el periodo improductivo de la tierra y empezaba el nuevo ciclo de producción y regeneración.
 
Sin que sirva de precedente utilizaré una expresión que los católicos decían antaño, como es la de “En Navidad, ponga un pobre en su mesa” para significar que en los tiempos que corren no hay suficientes mesas para tantos pobres como los que han ocasionado, en los cuatro últimos años, y siguen ocasionando un atajo de egoístas impresentables en nuestro planeta.
 
Pero lo que más me sorprende, y a la vez me inquieta, es ver como estos poderes fácticos, han conseguido, aterrorizar a la masa humana de tal manera, que no solo no se atreven a alzar la voz para protestar por la injusticia, ni osan juntarse para apoyarse mutuamente en la lucha para cambiar la situación, si no que han entrado en una especie de fatalismo conformista, que a todas luces va impedir una evolución en positivo para los intereses sociales.
 
Los partidos políticos de izquierda, sumidos en una lucha intestina sin cuartel, preocupados por repartirse unas cada vez más escasas cuotas de poder, parecen haber olvidado su misión principal por la que fueron creados, de servicio a la sociedad y particularmente a los más desfavorecidos, a fin de dotarlos del poder necesario para que nunca puedan ser explotados.
 
No me negaran Vds. que este conjunto de circunstancias que hasta aquí he expuesto, no son el marco más apropiado para una alegre Navidad, si no más bien todo lo contrario.
 
Con todo, estoy convencido, que al igual que nuestros ancestros, para mi la Navidad es una fiesta también de esperanza, pues si bien para ellos significaba el inicio de un nuevo periodo de productividad, para mi espero, sea el punto culminante de la crisis económica y el inicio de la salida, y no me refiero a los términos económicos si no de replanteamiento del sistema, donde nos cuestionemos el concepto de propiedad privada y valorando debidamente el de propiedad colectiva; donde el valor del trabajo no se determine como si de una mercancía se tratara, si no del rendimiento del capital humano.
 
Porque amigos, para los que aun no os hayáis enterado, estamos inmersos de lleno en una Revolución, que al igual que la Revolución Industrial del siglo XVIII, va a cambiar todo lo que en este mundo se menea y aunque ahora, al igual que entonces, vivamos épocas recesivas, donde los reaccionarios intentan frenar el avance, e incluso hacernos retroceder, a medio plazo surgirán nuevas ideas y modernas fórmulas económicas que tenderán al progreso y la justicia social con un reparto equitativo de la riqueza generada.
 
El problema reside, en que llegado el momento, las clases populares se encuentren preparadas para asumir las responsabilidades que se les vienen encima; cuestión de la que en principio dudo mucho, pues no veo que ni partidos políticos de izquierda ni las organizaciones sociales, estén demasiado por la labor. Vengo diciendo desde ya hace tiempo, que los sindicatos deberían tener un papel preponderante en la transformación de la sociedad; unos sindicatos evolucionados, que no decimonónicos y adaptados perfectamente a la economía del siglo XXI.
 
Con todo, sigo creyendo en los valores fundamentales del socialismo, de Libertad, Igualdad, y Solidaridad; al fin y al cabo los mismos en que se inspiraron los grandes revolucionarios del siglo XVIII y primera mitad del XIX y que estoy plenamente convencido, serán la base de la nueva revolución del siglo XXI.
 
Desde mi humilde condición de “Paliza del Reino” os deseo una Feliz Navidad y una buena entrada del año 2013. El día 7 de enero espero reencontrarme con todos vosotros.

lunes, 10 de diciembre de 2012

WERT UN ULTRA, LANZADOR DE CORTINAS DE HUMO


 


La propuesta de una nueva ley para la educación en España, que ha presentado el ministro Wert, levantando ampollas e incitando a la rebelión en Cataluña, cuando incide especialmente en un tema, como es el lingüístico, de especial sensibilidad en el noreste español, se me antoja una especie de cortina de humo para esconder una realidad susceptible de incitar a la rebelión, no solo en Cataluña, si no en toda España, como son los fatales resultados que los españoles estamos cosechando de las políticas económicas, desarrolladas por el gobierno ultraliberal que rige nuestros destinos, bajo los auspicios de la teutona Ángela Merkel.
 
Es una cortina de humo extraordinariamente densa, pues mucho es lo que tiene que ocultar. Desde unos inútiles recortes en los derechos sociales, que no han permitido este año reducir el déficit hasta la cifra propuesta por el propio estado español a la UE, con lo que quedarán muy en entredicho, las gestiones de José Luis de Guindos, Cristóbal Montoro  y el propio Mariano Rajoy que han demostrado delante del mundo entero una absoluta impericia, a la hora de hacer predicciones económicas y cumplir con los compromisos contraídos.
 
Incluso la propia ley, contiene elementos de suficientes altos vuelos como para tratarlos de ocultar, como es la carga ideológica en los aspectos de supresión de la Educación para la Ciudadanía, y el regreso de la Religión a la aulas, además de apostar decididamente por la privatización y elitización de la enseñanza.
 
En Cataluña, están consiguiendo plenamente los objetivos propuestos y creo que también en el resto de España, pues ya nadie habla de la ley en si, ni de todos sus puntos regresivos, como los mencionados anteriormente o el retorno a las revalidas y exámenes de estado, que antaño ya demostraron suficientemente su injusticia y su inutilidad; si no que vuelven como siempre a provocar un debate estéril, intentando dividir a una población como la catalana que hasta hoy no ha tenido el mínimo problema por la cuestión lingüística; y aun más después que el sistema de inmersión que la ley pretende cargarse, haya sido confirmado por el Tribunal Constitucional en repetidas ocasiones.
 
Estoy plenamente convencido, que dada la actual situación política en el principado, después del resultado de las absurdas elecciones convocadas por Artur Mas, y celebradas el pasado 25 de Noviembre, donde el principal partido de la derecha nacionalista catalana, se encuentra en un verdadero lío para formar un gobierno mínimamente estable; la propuesta Wert le sienta a las mil maravillas, pues le permite seguir culpando al estado español de todos los males que aquejan Cataluña, y en particular de animadversión hacia su signo identitario principal como es la lengua.
 
CiU, que desde el 11 de setiembre pasado, se ha adentrado en las procelosas marismas del independentismo, al no haber obtenido la mayoría absoluta que pretendía en estos comicios, se encuentra con que el Partido Popular, es la única formación que le puede respaldar la política neoliberal que practican desde hace dos años, con gravísimos recortes, en la sanidad y educación públicas y una peligrosísima deriva hacia la privatización de los servicios esenciales de educación y sanidad; todas las demás formaciones independentistas, le exigen un giro de 180º en política económica para darle soporte, al igual que los socialistas, que además le exigen un regreso a la negociación con el gobierno central dentro de los márgenes del estatuto de autonomía.
 
Es quizás por esto que me huelo todo este melodrama va a terminar con la avenencia PP CiU, después que los primeros acepten quitar los artículos que se refieren al tema lingüístico de la nueva ley y Artur Mas, o quien entonces esté al frente de CiU, acepte todos los demás, religiosos incluidos, pues de hecho es lo que ya está practicando en Cataluña, a cambio de aparcar sine die lo de la consulta independentista. Mariano podrá presumir entonces de haber desactivado, la revolución independentista, y evitado la rotura de España. Mientras que el líder nacionalista catalán presumirá de haber ganado la batalla más grave presentada por el estado contra la lengua catalana.
 
Todos los españoles sin excepción ninguna, vamos a pagar las consecuencias de este paripé, pues con todo y casi sin que nos demos cuenta, nos habrán metido de canto, una reforma educativa, que nunca hubiéramos pensado fuera posible, todos aquellos que en estos días hace 34 años votábamos ilusionados una constitución democrática.

lunes, 3 de diciembre de 2012

¿A QUÉ ESTAMOS ESPERANDO?

Es la pregunta que me hago de un tiempo a esta parte, mientras contemplo desesperado como el socialismo en España, va perdiendo día a día posiciones en la sociedad. El resultado de las recientes elecciones en Cataluña, cuando el que les ha convocado, Artur Más líder de la derecha nacionalista catalana, y presidente de la Generalitat de Cataluña, las planteó como una especie de plebiscito sobre el soberanismo en Cataluña, cosechando un gran fracaso, pese a ganarlas; ha puesto de manifiesto el error del argumento socialista, que hasta hoy decía no ganar las elecciones al Parlament de Cataluña, porque muchos ciudadanos votantes suyos en la generales, se abstenían cuando se trataba de autonómicas, al resultar que en esta ocasión, con una participación prácticamente igual a la de anteriores generales, ha retrocedido considerablemente en votos y escaños; o sea que los votantes otrora socialistas, ante una dicotomía, como la planteada por la derecha nacionalista catalana, se han lanzado de cabeza a las opciones nacionalistas españolas, como las representadas por el Partido Popular y Ciutadans.
 
Es verdad que Artur Mas y los suyos, además de esconder su fracaso en los dos años de gobierno con las elecciones pretendían, y en una pequeña parte han conseguido, pillar a contrapié a los socialistas para rematar una faena largo tiempo emprendida, de destrucción y aniquilación del Partido de los Socialistas de Cataluña. Pero también hay que decir, que a pesar que en el doceavo congreso celebrado por el PSC ahora hace un año, se establecieron unas directrices inequívocas basadas en el federalismo, por lo que se refiere a la cuestión territorial, una parte de la militancia, no ha cejado de marear la perdiz con el “derecho a decidir”; hasta el punto de crear un confusionismo en el electorado donde ya nadie tenia claro, si en caso de ganar los socialistas, convocarían también la consulta independentista. A mi entender, esta ha sido la principal causa del trasvase del voto socialista a Ciutadans, (168.771 votos).
 
Un confusionismo parecido al que he señalado en el socialismo catalán, aparece también en el conjunto del socialismo español, donde el elector no sabe, o no entiende con claridad las propuestas socialistas en cuanto a la salida de la crisis, sencillamente porque no se formulan con claridad. ¿A que están esperando los lideres del PSOE en decir que si ellos gobiernan, al día siguiente van a quitar, el copago de los medicamentos, que van a restituir las partidas presupuestarias destinadas a la educación pública, que van a actualizar las pensiones y que para ello van a reformar la fiscalidad sobre todo para los más ricos y perseguir con saña el fraude fiscal? ¿A que esperan para aclarar al ciudadano, que van a enfrentarse a la política de austeridad que pregona Fraü Merkel, aplazando el pago de la deuda y destinando los fondos a fomentar el crecimiento y el empleo?
 
El  pasado domingo día 2 de diciembre, conmemoramos el 30 aniversario de la investidura de Felipe González como presidente del gobierno, un hito en nuestra historia reciente, pues se iniciaba la verdadera transformación de una España, subdesarrollada políticamente hablando, que salía de una dictadura, en un verdadero y moderno país democrático; donde sus instituciones sufrieron cambios que a muchos parecían inverosímiles; incluso el ejercito, la institución que había representado la base de la dictadura, vio de la noche a la mañana como los viejos tics eran arrinconados y una nueva ideología de servicio al estado de derecho se imponía entre sus filas, convirtiendo en un abrir i cerrar de ojos, la institución en unas fuerzas armadas de corte internacional.
 
¿Se acuerdan Vds. como el PSOE de entonces consiguió una mayoría absoluta, nunca más superada de 202 escaños en el congreso de los diputados? Sencillamente diciendo en la campaña electoral las medidas que tomarían nada más llegar al gobierno, que habrían de poner el país a trabajar, para construir un estado del bienestar como el que envidiábamos a franceses y alemanes.
 
¿A que estamos esperando, Alfredo?       

lunes, 26 de noviembre de 2012

TENEDLO POR SEGURO; EL SOCIALISMO VENCERÁ


El socialismo en España y en Europa, salvo raras excepciones, parece de capa caída, como se encargan de recordarnos un día tras otro la mayoría de medios de comunicación, en su mayoría, dominados por la derecha. Los resultados de las elecciones, gallegas y vascas de hace unos días y las catalanas del pasado domingo, son suficientemente claros para comprender que los planteamientos socialdemócratas, defendidos por el PSC en Cataluña y el PSOE en toda España, ya no gozan de la predilección popular, que de una u otra forma, votando a otras opciones del espectro, ha dado la espalda a quienes de una manera sensata, pretenden una sociedad más justa, bajo los grandes valores humanistas de la libertad, la igualdad y la solidaridad.
 
No voy a ser yo quien niegue que los socialistas han cometido errores en las ocasionas que han tenido responsabilidades de gobierno, algunos de bulto, como el de experimentar inútiles terceras vías fuera de los cánones de la izquierda, orillando peligrosamente el capitalismo más salvaje en las épocas más agudas de la crisis; sin embargo con todo, honestamente sigo creyendo que para la sociedad en general, han sido siempre mejores los socialistas en el poder que el neoliberalismo y neoconservadurismo que hoy gobierna en la mayoría de países de la UE, en el parlamento de Estrasburgo y en las instituciones comunitarias. No seré tampoco yo, quien pretenda disimular la poca capacidad manifiesta de ejercer una oposición responsable, en cuanto se ha perdido el poder. Tanto en España como fuera de ella, el socialismo en la oposición se ha mantenido distanciado de los ciudadanos, al igual que cuando ocupaba la poltrona, situación que no le ayuda en lo más mínimo a la hora de pedir su voto o de inducirle a salir de casa para acercarse a las urnas.
 
Ya va siendo hora que nos pongamos las pilas, y los socialistas dejemos a un lado la soberbia del gobernante, regresemos a nuestro sitio natural al lado de los ciudadanos, y escuchando y viviendo con ellos sus problemas, debatamos y busquemos conjuntamente las soluciones, con el fin que en el momento en que nos otorguen de nuevo su confianza y accedamos a las posiciones de gobierno, les facilitemos su aplicación práctica.
 
La nueva sociedad española, surgida de la a crisis económica reclama de sus representantes políticos, una nueva forma de hacer, bien distinta a la que hasta hoy han llevado a cabo, condicionados por una deficientemente articulada transición a la democracia pactada en los años 80 del pasado siglo XX. Una nueva forma de hacer basada en los grandes valores humanistas del socialismo de siempre, libertad, igualdad y solidaridad, y ello es lo que me induce a pensar que el PSOE es quien mejor situado está para cumplir con estas expectativas en nuestro país, además de impulsar la práctica de los mismos valores en la UE.
 
De esta crisis, al igual que la de los años 30, Europa y casi me atrevo a decir el mundo, va a salir con un gran paso adelante socialmente hablando, si en España este paso lo lidera el PSOE, solo depende de el mismo y su capacidad de regresar a sus posiciones originales, no de ser el gobierno de los trabajadores, si no “los trabajadores gobernando”.

lunes, 12 de noviembre de 2012

REVOLUCIÓN Y REACCIÓN


Decía Pi Margall a mediados del siglo XIX que la Revolución es la paz y la Reacción la guerra. Eran tiempos convulsos, más o menos como los actuales, donde en España y en el mundo se intentaba evolucionar unas estructuras sociales, periclitadas por las grandes transformaciones que la llamada revolución industrial en plena efervescencia inducía.
 
La democracia entonces, intentaba abrirse paso en una España de nobles y curas, que se negaba siquiera a intuir los cambios liberalizadores que en Europa y América se producían y  determinaban una nueva concepción social del orbe.
 
La situación de crisis económica que por entonces se vivía, y estoy hablando de 1854, provocaba en España insurrecciones en las clases más bajas y pronunciamientos militares de toda índole, signos evidentes de una revolución que se fraguaba en los ambientes de la pequeña y mediana burguesía agrícola e industrial, que veía temerosa la necesidad de un cambio radical para desviar el camino hacia la ruina más absoluta, que España había emprendido a partir del desmoronamiento del imperio colonial.
 
Resulta sorprendente la clara visión premonitoria de Pi Margall, cuando los acontecimientos históricos que se sucedieron no hicieron más que confirmar la celebre expresión,  por cuanto, a todos los intentos revolucionarios que se han producido en España desde entonces, siempre les ha sucedido una contraposición de los elementos reaccionarios en forma violenta cuyo triunfo ha representado en todos los casos un retroceso social considerable.  Véase en el pasado siglo XX, dictadura de Primo de Rivera, una guerra civil, seguida de cuarenta años de autocracia y cuando parece que  de forma totalmente incruenta, se impone el sentido común y con 23 años de gobierno socialista se empiezan a saborear en España, los frutos de un estado del bienestar europeo; la excusa de una maldita crisis, sirve de nuevo a la reacción para hacernos retroceder socialmente 40 años.
 
Porque amigos no lo duden ni un momento, los 23 años de gobierno socialista de la mano de Felipe Gonzalez, fueron los de una auténtica revolución que situó este país en la esfera mundial de las democracias avanzadas. Ahora hemos vuelto por desgracia a un periodo de reacción, donde se intentan desmontar los logros revolucionarios, no dudando para ello en apelar al nacionalismo y el patriotismo, con el fin de enfrentar a unos con otros por aquello de a río revuelto ganancia de pescadores; aunque esto coloque al país o incluso al continente al borde de la confrontación armada.
 
¿No han oído Vds. estos días, de boca de los que se llaman expertos, que la situación en España es parecida a la de los años treinta del pasado siglo XX? 
 
También entonces después de una revolución pacífica como la que representó la proclamación de la II Republica española y la puesta al día del estado español en el seno de la comunidad internacional, por parte de un gobierno de izquierdas. En 1934 la victoria electoral de las derechas, significó el desmontaje de todos los logros democráticos conseguidos, creando además un clima de confrontación entre ciudadanos, que llegó al paroxismo en la nueva convocatoria electoral de 1936 cuando las izquierdas regresan al poder y los poderes fácticos se sublevan, procurándonos el mayor retroceso histórico que nunca ha tenido este país, por un negro período de 40 años.
 
¿Vamos a permitir que nuevamente nos desmonten los logros sociales conseguidos en los años de gobierno socialista? ¿Seremos capaces los españoles de regresar al periodo revolucionario, que ha significado la paz, y el progreso, sacudiéndonos de encima, la reacción en la que estamos inmersos? ¿O lamentablemente nos deslizaremos por la pendiente reaccionaria que nos ha de conducir a un seguro enfrentamiento?

lunes, 29 de octubre de 2012

REPÚBLICA FEDERAL ESPAÑOLA


Es verdad que los acontecimientos se precipitan y en este país, España, de golpe y porrazo parece que todo se tambalea, incluso lo más sagrado, y que lo hecho hasta hoy ya no sirve, aunque algunos pusilánimes, se aferren como lapas al inmovilismo más descarado, no hacen más que intentar una inútil resistencia a un cambio generacional de carácter progresista, que se quiera o no va acabar imponiéndose.
 
Vivimos, los españoles una fase extraordinaria de nuestra historia, donde todo lo que parecía eterno y perdurable, por las propias miseria humanas está desplomándose estrepitosamente; ¿quien hubiera creído hace tan solo treinta años que las grandes instituciones del estado, como el Tribunal Constitucional, El Tribunal Supremo, la Audiencia Nacional, e incluso la propia Monarquía, estarían en situación de total desprestigio?
 
Es a mi entender una situación totalmente inadmisible, que la democracia no haya entrado, después de treinta años en el estamento judicial, hasta el punto no solo de haberse convertido en refugio de los partidarios del antiguo régimen autocrático, si no que la propia endogamia, les está poniendo al descubierto todas sus miserias, Un presidente del supremo que se pagaba sus juergas con el dinero público; una animadversión generalizada, hacia el estado autonómico, que llega hasta el punto de burdas maquinaciones en el TC hasta en base a  reacusación a un miembro, susceptible de cambiar las mayorías.
 
Todo ello junto a una crisis económica sin par, hace que desde la base del pueblo llano se empiece a manifestar un hartazgo y una desconfianza total, hacia los representantes democráticamente elegidos e incluso hacia el propio sistema democrático; por cuanto parece que nadie sea capaz de encontrar un verdadero camino que nos conduzca a la salida del túnel, o al menos que sea capaz de hacernos creer en la esperanza que lo encontraremos en breve plazo.
 
Este hartazgo que en Cataluña ha tomado el derrotero independentista; auspiciado por un gobierno de la derecha nacionalista que como un regalo caído del cielo, ha encontrado en ello la oportunidad de esconder tras la señera estrellada el fracaso de su política económica de recortes y austeridad extrema, llevando la región al borde del colapso; ha despertado en buena parte de formaciones políticas españolas la necesidad de buscar en el federalismo la solución a una estructura de estado respetuosa con la diversidad fuente de riqueza de España; cuestión que ha comportado la inmediata reacción de las fuerzas ultranacionalistas españolas del Partido Popular, que inmediatamente se han autoproclamado defensores a ultranza de la constitución de 1978 y de una sagrada unidad de España, mientras que Artur Mas líder del nacionalismo catalán, habla de la imposibilidad de encajar Cataluña en España, en una clara voluntad de buscar la confrontación.
 
Los que desde Cataluña venimos defendiendo el federalismo como la gran fórmula, para implicar a todos los pueblos que componemos España en un proyecto común desde el respeto a la diversidad; nos alegramos en sobremanera de las palabras del secretario general del PSOE a favor de esta fórmula, mostrándose incluso dispuesto a reformar la constitución si fuera necesario, después de haberlo consensuado con los representantes socialistas en los territorios; pues nos abre la esperanza que a partir del momento en que el socialismo recupere el poder en España y en sus comunidades autónomas, los españoles y quizás por primera vez en toda la historia, remaremos todos juntos y en la misma dirección, materializando un proyecto que a buen seguro nos permitirá superar el marasmo donde hoy estamos metidos. Si además resultase que este federalismo, los españoles decidiéramos situarlo en un marco republicano, pues miel sobre hojuelas, no les quepa duda alguna.

lunes, 22 de octubre de 2012

HUGO CHAVEZ EL INCOMBUSTIBLE


Vaya por delante, mi felicitación a Hugo Chavez por su victoria en las elecciones del pasado 7 de octubre, que garantizan hasta el 2018 la permanencia de la revolución bolivariana en la máxima institución del estado de Venezuela.
 
El pueblo venezolano ha demostrado una vez más que después de 14 años, sigue, mayoritariamente, confiando en un líder que si bien populista en sus formas, ha sido capaz de articular un sistema donde todo el mundo, tenga acceso a los servicios esenciales, independientemente de su poder adquisitivo; en cierta forma podríamos decir, que ha sabido instaurar una versión americana del estado del bienestar europeo, este que desde el neoliberalismo, hoy predominante se intenta denostar acusándole de todas las iniquidades.
 
La derecha neoliberal del país caribeño, en estos catorce años de república bolivariana, lo ha intentado todo para desbancarle del poder sin conseguirlo,, comenzando con un golpe de estado, que fue abortado, por la propia ciudadanía, que con su masiva presencia en las calles, demostró a los conjurados su firme voluntad de preservación de la democracia. En los diversos comicios que han tenido lugar, la oposición neoliberal ha presentado todas sus caras, desde la más intransigente hasta la más conciliadora como ha sido esta vez, con Henrique Capriles, cosechando repetidos fracasos, por el simple hecho, que las clases populares de Venezuela no están dispuestas a regresar al injusto sistema, donde en nombre de una libertad mal entendida, unos pocos acaparaban la riqueza de unos recursos naturales que son de todos.
 
Si es verdad, como he dicho antes, que las fórmulas de Chavez son populistas, pero se me antoja se trata de un populismo bien distinto al que en España practican algunos líderes derechistas militantes en el Partido Popular, como por ejemplo el alcalde de mi ciudad Badalona, que si bien intenta contemporizar con el vecindario derivando sus cuitas y problemas hacia la localización de unos falsos culpables, como la inmigración, a la hora de la verdad no busca solucionar sus problemas y mejorar su nivel de vida, si no enfrentar a unos con otros, quizás por aquello de que a río revuelto ganancia de pescadores.
 
Hugo Chavez, en estos últimos 14 años ha devenido sin lugar a dudas, en el líder carismático de la izquierda latinoamericana superando incluso al propio Fidel Castro, por cuanto ha conseguido en sus mandatos, reducir el índice de pobreza en Venezuela, desde el 50% de la población cuando accedió al poder al 25% actual, un logro a todas luces espectacular, que ningún otro país del nuevo continente, aplicando técnicas económicas capitalistas ha conseguido; antes al contrario, incluso en la superpotencia por excelencia, en Norteamérica, su índice de pobreza ha aumentado considerablemente.
 
En España sin ir más lejos, el índice de ciudadanos por debajo del umbral de la pobreza, ha aumentado espectacularmente, bajo el gobierno de Mariano Rajoy, superando ya el 25%, con el agravante, que la excusa de la crisis económica, y una falsedad como que las ayudas y subsidios desincentivan la búsqueda de empleo, estos ciudadanos se encuentran en un punto de total indefensión y precariedad, muy al contrario de la Venezuela de Hugo Chavez donde los desempleados, a parte de ser cada vez menos, ven como día a día el estado se preocupa por aliviar su situación en base a prestarle los servicios básicos con cargo al erario público.
 
Quizás los próximos seis años sean los últimos en que Chavez pueda ostentar el poder en Venezuela, la edad no perdona; aun así confío los revolucionarios bolivarianos del país del Caribe, sepan van a apoyar a un digno sucesor, que continuara su obra no solo por el bien de Venezuela, si no de toda America Latina, por no decir de todo el orbe planetario.

lunes, 15 de octubre de 2012

LA UE, FEDERAL O NACIONALISTA


Observando los acontecimientos que se suceden estos últimos tiempos y a la luz de a perspectiva histórica que por edad debo tener, veo con preocupación como el regreso del ultraliberalismo a las áreas de poder en Europa, está llevando al traste la idea última de UE que los padres fundadores consiguieron cimentar, en la década de los 50 del pasado siglo XX.
 
Los  horrores de la II Guerra Mundial, consecuencia del afán del nacionalsocialismo alemán por regresar a las formulas del viejo y caduco imperialismo, como la mejor manera de sacar a su país de la terrible crisis económica que asolaba igual que ahora al mundo occidental; fueron la principal razón por la que los Adenauer, Spaak, Segni…. , decidieran en 1957 sentar las bases de una Europa Unida, bajo los principios de la democracia y de los grandes valores humanistas de la Libertad, la Igualdad y la solidaridad, como el antídoto eficaz a una nueva y mas terrible confrontación entre los pueblos que la componen. De hecho todo lo contrario a la pretensión de Bismark primero y de Hitler después, de una Europa sometida a los designios de una Alemania de clara vocación imperialista.
 
Hoy 55 años después de la firma del Tratado de Roma, de nuevo la derecha imperialista vuelve por sus fueros y puede que como reacción al ataque preventivo de la gran superpotencia económica mundial, que hoy día se presenta bajo el eufemismo, “mercados”, contra la amenaza de un serio competidor en la escena mundial, como una UE socialdemócrata; resurgen fatalmente de nuevo los nacionalismos, y con ellos alguna que otra vocación imperialista más o menos evolucionada, y que ya no precisa ni de grandes ni sofisticados ejércitos, para expandirse territorialmente si no que en base a rescates, y primas de riesgo, acaban sometiendo a su voluntad, a todos aquellos que de buena fe seguimos creyendo en una UE democrática e integradora, más allá de una simple unión económica y mercantilista.
 
Observen Vds. amigos, la sofisticada estrategia empleada desde los grandes poderes de Wallstreet, en base a cuantiosas inversiones logran contralar una buena parte de la deuda de los países de la zona Euro; a partir de un momento determinado, y desde los medios de comunicación que controlan hacen saltar por los aires, las economías de los países más débiles de la eurozona, como Grecia, Portugal, Irlanda, España e Italia, en base a descubrir sus miserias, que hasta entonces ellos mismos habían ocultado; mientras tanto procuran por todos los medios apoyar la economía alemana, con intereses prácticamente cero en la financiación que le procuran, con el fin de profundizar en las diferencias entre débiles y fuertes, al tiempo que se excitan los ánimos de los nacionalistas alemanes que terminan por sentirse superiores a todos los demás.
 
Todo ello con un doble objetivo, o bien conseguir la rotura del Euro, y consecuentemente el fin de la UE como potencia económica en el mundo, o que Alemania, acabe colonizando los demás países de la Unión y los explote, al igual que pretendieron en sus tiempos Bismark y Hitler, cuestión que como es fácil de adivinar, acabaría conduciendo a una gran inestabilidad, por la conflictividad social generada, y a la larga al rompimiento de la UE.
 
¿Cómo podemos evitar el desastre?  A mi modo de ver avanzando hacia una plena unidad política en la UE, en base a una estructura federal, arrinconando las antiguallas del pensamiento nacionalista y con los mecanismos de solidaridad territorial claramente definidos, además de unas políticas sociales y económicas iguales para todos de acuerdo con los principios de la socialdemocracia y con los clarísimos objetivos de proporcionar un estado del bienestar de alta cualidad  a los ciudadanos europeos.
 
Leo que el club de Berlín, recomienda avanzar hacia la solución federal, es un buen primer paso, pero sigo convencido, que en verdad esto no será posible, hasta que el Parlamento de Estrasburgo, no lo componga una clara mayoría socialdemócrata, en lugar de la neoconservadora que lo compone hoy.  Por todo ello, alerta amigos, en el 2014 habrá unas nuevas elecciones Europeas, y por consiguiente la gran oportunidad para cambiar el panorama. Ya empieza a ser hora que tomemos conciencia, que esto de Europa si va con nosotros y que no todos los políticos son iguales. Esto de abstenerse en las europeas, empieza a ser peligroso.

lunes, 8 de octubre de 2012

LA UE SOLO TIENE FUTURO CON LA IZQUIERDA EN EL PODER


Ha quedado demostrado, por activa y por pasiva que la idea de una Unión Europea capaz de tratar de tu a tu con las grandes potencias de América y Asia, USA y China, solo puede ser factible desde una concepción izquierdista, la única que desde una convicción internacionalista, es capaz de superar todos los condicionantes que la idea tribal y diferenciadora que el decimonónico nacionalismo impone.
 
Solo a través de la defensa a ultranza de los grandes valores humanistas de la libertad, la igualdad y la solidaridad, seremos capaces de articular un sistema económico, generador de riqueza, equitativamente repartida, capaz de demostrar al mundo que existen alternativas al egoísta e insolidario sistema liberal neoconservador, que rige en estos días.
 
Debo reconocer sin embargo, la posibilidad que se acabe montando una UE de corte neoliberal, sin base democrática y partiendo de la base del dominio de uno o dos sobre todos los demás, al igual que lo que pretendía Hitler mediante la fuerza de los Panzer y la Lutwaffe. Hoy de una forma no tan salvaje se busca ejercer el mismo dominio mediante casi tan destructiva como las divisiones acorazadas, como es el control absoluto del crédito. ¿O no es verdad que Grecia se encuentra ya en esta posición de pleno dominio alemán y España va por el mismo camino? Aunque se quiera aparentar que las decisiones se toman desde Bruselas y del BCE, cada vez tenemos más claro que las directrices se marcan desde Berlín y la sede del Bundesbank.
 
¿Queremos una Europa de este tipo? Seguro que no, pues la UE debe tener como objetivo principal el bienestar de sus ciudadanos, sin exclusiones de ningún tipo. ¿Quien entonces, puede garantizar esta premisa, pues únicamente la socialdemocracia y el estado del bienestar como garante de un justo reparto de la riqueza que generamos.
 
La idea de la UE, surge tras la II Guerra mundial, con la finalidad que un desastre, como el ocurrido y que contaba con numerosos precedentes históricos, no se volviera a repetir; se trataba de comprometer a los antiguos contendientes, a través de lazos económicos lo suficiente mente fuertes, con el fin de obligar a solucionar las diferencias mediante el dialogo y no a garrotazos.
 
En aquellas circunstancias, derecha e izquierda, no solo en Europa si no también en todo el mundo occidental, convinieron en que los principios socialdemócratas eran los únicos que podían garantizar un plan viable de recuperación económica de la devastada Europa y es así que con el poder económico sometido a los dictados de la política se consiguió, hasta los años 90, no solo el mantenimiento de la paz si no un extraordinario progreso económico como nunca se había conocido. En los años 90 de la pasada centuria, la revolución neocon promocionada por Ronald Reegan y Margaret Tatcher, viene a invertir la situación, a partir del momento en que la consagración del individualismo, viene a desplazar los grandes valores del socialismo en general y el de la solidaridad en particular; y todo para conseguir permutar la preeminencia de la política sobre la economía.
Todo lo expuesto anteriormente, me hace concluir que en la nueva configuración económica que se está estructurando en estos albores del siglo XXI, en base a la supremacía de unas grandes potencias económicas, la primera en América, fundamentada en el neoliberalismo desregulado más salvaje y en Asia, en base, en base a sistemas autocráticos carentes de toda libertad, Europa puede y debe surgir como tercera potencia, democrática por excelencia y en base a un reparto muy justo de la riqueza y donde la explotación del hombre por el hombre quede del todo relegada. Para ello sin embargo, los europeos debemos sacudirnos con rapidez los lastres de unos nacionalismos decimonónicos y entregarnos en cuerpo y alma a una concepción política federal del viejo continente, con gobierno basado en los claros principios del socialismo democrático humanista, Libertad, Igualdad y Solidaridad.
 
El camino por esta senda, ya está emprendido, en Francia con las elecciones legislativas del 2013 se consolidará la victoria obtenida por François Hollande; las encuestas vaticinan, un extraordinario ascenso de la socialdemocracia en Holanda, en las próximas elecciones del proximo setiembre; en Alemania cada vez está más clara la derrota del actual gobierno de la CDU que preside Ángela Merkel, a favor de los socialdemócratas del SPD; por ello los españoles debemos mirar el futuro con un cierto optimismo y solo debe preocuparnos encontrar la fórmula para echar cuanto antes el rancio gobierno derechista que preside Mariano Rajoy, para no perder el tren del futuro que va pasar muy pronto.

lunes, 1 de octubre de 2012

CATALUÑA ¿RESCATADA? ¿INTERVENIDA?

Uno de los grandes males que a mi entender adolece nuestro sistema democrático, es la poca o nula capacidad de nuestros políticos, mayormente los de derechas, de reconocer cuando han fracasado en sus políticas, al no obtener los resultados que habían prometido en su campaña electoral.
 
En el caso de Cataluña, después de 7 años de gobiernos de coalición de fuerzas izquierdistas, con la presidencia de los socialistas Pascual Maragall y José Montilla, un Artur Mas, representante de la nueva generación de la derecha nacionalista catalana, consigue la poltrona del Palau de la Plaça de Sant Jaume; en base a una campaña electoral, de responsabilizar al anterior gobierno tripartito de los males que aquejan a Cataluña, ofreciendo como solución una gestión totalmente innovadora, y exigente con el gobierno central, por la que en base a una mayor autonomía en la gestión de los propios recursos, se impulsaría la actividad económica, consiguiendo en poco tiempo, encarrilar el país hacia una pronta salida de la crisis económica.
 
Dos años después de a victoria electoral de Mas, los resultados no pueden ser más desesperanzadores, pues además de ser la autonomía, más endeudada en valores absolutos, ha agotado absolutamente su capacidad de refinanciación, incluso con los llamados bonos patrióticos, que reinstauró el tripartito, con el fin de comprometer a los ahorradores catalanes en la financiación de su gobierno autonómico.  Es bien sabido que las agencias internacionales de rating, consideran los bonos emitidos por la Generalitat de Cataluña, al nivel de los bonos basura, y la llamada prima de riesgo de la deuda Catalana, supera ya los 1.200 puntos, cuestiones que invalidan totalmente la capacidad del gobierno catalán a la hora de buscar financiación en el exterior.
 
Son pues estas las razones que han obligado a los responsables económicos de la Generalitat, a solicitar un primer rescate urgente de 5.023 millones de euros al gobierno central, a fin de atender los vencimientos de la deuda del último trimestre de este año 2012.
 
Aunque de entrada, Mas quiso hacer el gallito, diciendo, que no hacia otra cosa que solicitar el dinero que los catalanes habían pagado con sus impuestos, y que por ello no debía tener ningún condicionante político, lo cierto es que se trata de una intervención en toda regla, pues cuando uno se encuentra en la tesitura de no poder acudir a nadie más, como es el caso, esta de hecho sometiéndose a todas las condiciones que el prestador quiera imponerle y  hoy y aquí, esto es extremadamente peligroso, por la manifiesta animadversión ideológica del Partido Popular, en el gobierno de España, frente al autonomismo. No olvidemos que Manuel Fraga, en los gloriosos tiempos de la Alianza Popular, el precedente del PP, predicaba el voto negativo a la Constitución, en desacuerdo únicamente, en los artículos que hacia referencia a este nuevo modelo de estado.
 
¿No es un gran fracaso del gobierno catalán haber llevado al país a este punto?  No vale ya echar la culpa a los anteriores gobiernos de Maragall y Montilla, como aún siguen haciendo los secuaces de Mas, dos años de gobierno son más que suficientes para un buen gestor, para invertir las tendencias, y hoy en Cataluña, si no se hubiera optado, por seguir la doctrina neoliberal que desde la derecha se nos impone de una austeridad absoluta, quizás nos miraríamos el panorama de manera bien distinta desde un camino de crecimiento, que nos haría pensar al menos en la utilidad de los sacrificios que nos han exigido hacer a todos los ciudadanos.
 
Hoy Artur Mas, en su afán de huir hacia delante para esconder el fracaso de su gestión, convoca nuevas elecciones enmascaradas de plebiscitarias, no por la gestión realizada, si no una aventura independentista condenada al fracaso de antemano, por ser incompatible con la nueva idea de Europa y del mundo que ha de configurarse a la salida de la crisis.
 
Espero y confío en el buen sentido de la mayoría de los catalanes que no se dejen llevar por arrebatos, o pasividad extrema y comprendan que las soluciones rupturistas o continuadoras de lo mismo que se plantean des de los nacionalistas de uno y otro signo, no van a llevarnos a ningún sitio y que solo la solución federal para España que se propone desde El PSC y el PSOE, nos permitirá superar los problemas que nos atenazan a todos.

lunes, 24 de septiembre de 2012

LOS FALSOS PROFETAS


Dicen, los libros sagrados del cristianismo que al llegar el fin de los tiempos, una de las señales premonitorias, será la aparición de falsos profetas, que al servicio del maligno, efectuaran grandes prodigios para embaucar a los creyentes fidelísimos, apartándoles del buen camino entregándoles a la adoración de la bestia.

 
Si tienen razón estos libros, el fin de los tiempos debe andar muy cerca, pues de falsos profetas no nos faltan en estos angustiosos días que estamos viviendo, profetas que nos engañan un día tras otro, prometiendo sacarnos del pozo donde ellos mismos nos han metido, aunque en realidad lo que están haciendo es hundirnos más y más en el.

 
¿No consideran Vds, un falso, o quizás mejor decir unos falsos profetas, esta gente que de forma anónima y sin dar la cara, movían los hilos del llamado 15 M, con slogans como el de “que no nos representan” o “todos son iguales” o “PSOE y PP la misma mierda es”; hasta conseguir que un alto índice de abstención entregar el poder en España a la derecha más reaccionaria de Europa, y con mayoría absoluta?

 
¿No son también falsos profetas, estos que convocaron para el 27 de julio pasado manifestaciones en todas las ciudades españolas, en contra de “los políticos, a fin de contrarrestar las que específicamente en contra del gobierno de Rajoy y su política de recortes habían convocado, los sindicatos y partidos políticos de la oposición?

 
Para terminar, ¿no consideran falso profeta, a los convocantes de la protesta con eslogan “Tomemos el congreso”, para mañana 25 de setiembre, una convocatoria donde no aparece ninguna organización como convocante y todas las investigaciones que se han hecho al respecto, acaban conduciendo a destacados militantes de la ultraderecha española? 

 
Miren amigos, a mi al principio el movimiento del 15 M no me caía mal, pues de hecho se presentaba como un movimiento revolucionario surgido de las propias bases populares, sin embargo cuando en Barcelona invitaron a un islandés para que en una conferencia pública explicara la experiencia de los indignados de aquel país, y este les dijo la verdad innegable, que es a través de la política y los políticos donde se encuentra el verdadero camino, y esto les molestó tanto que despidieron al conferenciante casi con cajas destempladas; fue entonces cuando me di cuenta, que no era tan romántico como parecía este movimiento, si no que alguien de manera perversa, tras las bambalinas movía los hilos, con la única pretensión de desprestigiar el sistema de partidos políticos. Poco tiempo después mis temores acabaron confirmados, cuando después de las elecciones que dieron la victoria al partido Popular, por mayoría absoluta, el movimiento de los indignados desapareció cual azucarillo en un café; ya habían conseguido su principal objetivo.

 
El pueblo español, aunque los del gobierno Rajoy, parecen creer lo contario, no es nada tonto, ni se deja embaucar fácilmente; y si por una vez se dejó engañar votando al PP, o quedándose en casa facilitando con su abstención la victoria de Mariano Rajoy, es bien cierto que el 27 de julio pasado, dio la espalda a los manipuladores que vieron como su movilización se tradujo en estrepitoso fracaso.

 
Ahora, la nueva propuesta del “facherio” español, la Toma del Congreso, ha conseguido embaucar a una desesperada Izquierda Unida que ya no sabe que hacer para traducir, en apoyos a su causa la indignación de muchos ciudadanos, creyendo que infiltrándose en este tipo de acciones radicales, y aprovechando el anonimato de su convocatoria va a capitalizar la acción; aunque no ha calculado que la mayoría ciudadana no está por acciones radicales, si no que a lo que aspira es un plan serio y creíble que les encamine hacia la salida de la crisis, más o menos como están haciendo los vecinos franceses con François Hollande.

 
Hagamos pues amigos, lo que los evangelios aconsejan y estemos alerta de no atender a los falsos profetas, que lo único que pretenden es que acabemos adorando a las bestias más inmundas del fascismo y la dictadura.

lunes, 17 de septiembre de 2012

DESPUES DE 1,5 MILLONES GRITANDO INDEPENDENCIA




¿Que debería pasar ahora, después que el pasado 11 de setiembre 1,5 millones de los 7 que constituyen el pueblo de Cataluña, saliera a la calle, pidiendo unánimemente de secesión del resto de España?
 
En primer lugar, e intentando hacer un análisis de urgencia, del porqué una cantidad tan enorme de personas, en un día en extremo bochornoso, climatológicamente hablando, salieran de sus casas para concentrarse en el centro de Barcelona gritando INDEPENDENCIA; debemos considerar un superlativo hartazgo, de una situación a la que la derecha en el poder, no ofrece salida alguna. En segundo lugar, decir que el independentismo de siempre minoritario en nuestro país, ha conseguido, a través de una media verdad, canalizar en su provecho una buena parte de las frustraciones que sentimos en lo más íntimo los catalanes, después de largos años, en que los separadores del estado español, nos han vejado, tratándonos como un pueblo vencido al que se puede humillar impunemente.
 
En lo del martes día 11 hay que ver la reacción a las burlas y sátiras de Rodriguez Ibarra, las incomprensiones manifiestas de Esperancita Aguirre, del Aznar que hablaba catalán den la intimidad, las vejaciones a nuestra lengua que se han procurado desde grandes instituciones del estado, del menosprecio a una cultura milenaria, y así hasta un larguísimo etc. Que culminaría en una sentencia desfavorable a un estatuto de autonomía, refrendado por el Parlament, el Congreso y el Senado y todo el pueblo de Cataluña, dictada por un Tribunal Constitucional deslegitimado, no solo por ser ocupado por unos cargos que deberían haber sido renovados tiempo a, si no por una serie de maquinaciones políticas, que alteraban substancialmente las mayorías de su composición y ello como consecuencia de un recurso del Partido Popular que nunca debió ser presentado; sin olvidar la extraordinaria sandez de Monago este mismo mes de setiembre.
 
Algunos, entre los que me incluyo, opinamos que no debe interpretarse la masiva asistencia a la manifestación con un aumento exorbitado de los independentistas convencidos en Cataluña, aunque si como una seria señal de alarma de muchas cosas que no se están haciendo bien políticamente hablando, en nuestro país. Desde el Socialismo catalán, no se ha conseguido, ni cuando se ocupaba el poder ni ahora desde la oposición, ilusionar a la ciudadanía con la idea de un estado federal en España, a mi entender la gran solución para implicar a todos los pueblos que constituimos España en un proyecto común; pero las reticencias de una parte importante del PSOE, junto a una poco audaz gestión del PSC en el tema estatutario, cuando se ocupaban posiciones de poder en Cataluña; además de las feroces críticas, que desde el nacionalismo español y catalán, intuyendo el consabido peligro que entrañaba a la tradicional política victimista de separatistas y separadores, se lanzaron despiadadamente; por lo que en cierta manera resulta lógico que mucha gente que se auto considera no independentista, acabara asistiendo a la manifestación como señal de rechazo a las continuadas vejaciones.
 
Creo llegado el momento de aclarar posiciones, y los recientes cambios en el PSC, van en esta dirección definiéndonos claramente como federalistas, con todas sus consecuencias y desterrando las ambigüedades pseudo nacionalistas que nos podían apartar del verdadero camino; también el discurso de Rubalcaba en la Fiesta de la Rosa en Barcelona del domingo 16 de setiembre, donde de nuevo se hizo referencia a la España Plural, nos hace concebir esperanzas que el socialismo catalán y español ha sabido tomar nota de sus errores y en cuanto recuperen el poder, la articulación de los pueblos que componen España, de una vez y para siempre, mediante una federación va a ser prioridad principal.
 
Creo que es el día 20 de setiembre, que Don Artur Mas y Don Mariano Rajoy deben verse las caras en Moncloa por el tema del Pacto Fiscal, es allí donde veremos la imposibilidad tanto de uno como de otro para entenderse, en estos temas de intereses tribales, cuestión que contrasta con la facilidad de ambos para llegar acuerdos de orden ideológico cuando se trata de aplicar las más salvajes políticas neoliberales. El desacuerdo, va a ser aplaudido y celebrado, por los de ERC, SI, DC, y demás grupúsculos soberanistas, que, obligaran a Don Artur a convocar unas elecciones anticipadas con la pretensión sean plebiscitarias y con la secesión de España, como punto principal y prioritario del programa de Convergencia, (ya veremos si esto comporta una separación de Unió). Aunque claro está, amigos lectores, todo está sujeto a la decisión de quien ostenta en verdadero poder en Cataluña, Don Isidro Faine, presidente y factótum principal de “La Caixa”, que de momento no ha dicho “esta boca es mía”            

lunes, 10 de septiembre de 2012

NACIONALISMO, CENTRALISMO Y OTRAS ZARANDAJAS


 
Publico este artículo en la vigilia de la Diada Nacional de Cataluña, el 11 de Setiembre de 2012, una fecha que se presenta algo movida por el calentamiento que han producido todos estos que en nuestro país. Parecen tan interesados en enfrentamientos tribales, y que alguien con muy buen criterio en un momento determinado de la historia, definió como separatistas y separadores; englobando en los primeros a los nacionalistas vascos y catalanes y en los segundos a los nacionalistas españoles, dejando bien claro que ni unos ni otros mueven un solo dedo para procurar un marco adecuado de  convivencia pacífica de unos y otros en un mismo espacio.
 
Será quizás porque mi infancia y toda la juventud, la pasé anegado de mensajes ultranacionalistas españoles, que unos impresentables fascistas, de ansias imperialistas, proclamaban a los cuatro vientos, sin oposición ninguna y alentados por un gobierno autócrata y criminal que por entonces regia, que acabé por aborrecer todo lo que sonaba a patrioterismo; y será también por esto que se me eriza todo el vello del cuerpo, cuando oigo algunas proclamas de estos nuevos ultra independentistas catalanes que parecen me nieguen la posibilidad de que yo puede entenderme con los de Albacete, además de acusarme de renegado porque me gustan las sevillanas, pues pienso no hay prácticamente diferencia entre el discurso de unos y otros, siempre basado en la confrontación y la competencia, como si de tribus o clanes diferentes se tratara.
 
Ya se que en períodos de crisis, es cuanto más audiencia tienen los discursos egocéntricos, ya sé que se hacen aparentemente más soportable las desgracias, el culpabilizar a otro de la causa de los males de uno; pero se me da parecer casi imposible que en la España del siglo XXI, hayamos aprendido tan poco de nuestra trágica historia, más que de desencuentros, podríamos decir de graves encontronazos, y ya se sabe el dicho que los pueblos que ignoran su historia son condenados a repetirla.
 
Mañana día 11 de setiembre de 2012, muchos catalanes nos vemos obligados a encerrarnos en casa, cuando por voluntad y tradición hubiéramos salido a manifestarnos en afirmación de nuestra identidad, solidariamente con los demás pueblos de España y Europa y el motivo, es que una minoría de ciudadanos, como son los partidarios de la independencia, alentados por un gobierno de la derecha nacionalista catalana, que oculta el terrible fracaso de sus políticas ante la crisis económica, con una huida hacia delante en nombre de un soberanismo de radicalidad extrema, se han apropiado de la manifestación imponiendo sus lemas y consignas, sin haber ni siquiera intentado el mínimo consenso con el resto de fuerzas políticas, no nacionalistas, en una prueba más del carácter poco dialogante de estas doctrinas identitarias.
 
En verdad amigos, uno ya empieza estar harto de tanta mezquindad, y sobre todo cuando ha podido comprobar, a lo largo de mis años de existencia y lo que la curiosidad me ha hecho buscar en los libros, que el llamado centralismo, que no es otra cosa que la divinización de un ultranacionalismo español, siempre ha procurado la fatalidad y el atraso en España, intentando ejercer un dominio sobre culturas distintas a la predominante y por otro lado los nacionalismos llamados periféricos, cuando solo buscan la confrontación desde el victimismo, como fórmula para esconder la inutilidad de sus políticas a la hora de cohesionar la sociedad a su cargo.
 
No puedo por más que lamentar y criticar profundamente la usurpación de la Diada de Catalunya que este año han hecho unas minorías y desear de una vez por todas que despierten los pueblos conformadores de este ente llamado España, y se den cuenta que una solución federal, es la mejor y más positiva de cara a garantizar una convivencia desde el respeto a una diversidad que nos enriquece a todos en conjunto.

domingo, 2 de septiembre de 2012

ANDANADAS CONTRA EL PSC-PSOE

Que en el seno del Partido de los socialistas catalanes, existe una corriente interna que se proclama más catalanista que el resto, es una verdad más que evidente que nadie se ha esforzado nunca en ocultar; y que este grupo ideológico es profundamente federalista, como el resto de militantes no tan catalanistas como ellos, también es de una certeza inapelable.
 
También es verdad que algunas veces se han dado casos concretos de militantes socialistas, quizás de poca convicción en sus principios socialistas, que se han dejado tentar por veleidades nacionalistas, olvidando que los principios fundamentales humanistas que configuran la ideología del socialismo, implican una filosofía internacionalista, que rompe totalmente con las barreras diferenciales, que el nacionalismo intenta siempre imponer como base y fundamento de sus razón de ser. En estos casos y tal como corresponde a un partido democrático, desde el PSC no se ha puesto traba ninguna a la salida del militante en cuestión, para que se acoja al seno de formaciones más afines con su manera de pensar, generalmente el PP en el caso de los nacionalistas españoles o de CiU en el de los catalanes.
 
Un ejemplo muy claro de lo que acabo de exponer lo dio Ferran Mascarell, conseller de cultura, en el anterior gobierno que presidió José Montilla, y hoy de nuevo en el mismo cargo en el gobierno convergente del Sr. Artur Mas. Nadie en el socialismo catalán lo ha criticado, más allá de unos primeros momentos, donde su actitud hizo pensar en un afán por conservar un cargo, frente a una fidelidad a unos ideales.
 
Aunque resulta muy curioso, que quien si parecer, querer aprovecharse de este cambio de camisa del Sr. Mascarell, es Don Luis Recoder, ilustre miembro del nuevo staff convergente i conseller actual de Política Territorial y Obras Públicas, que alienta a los miembros del sector catalanista del PSC a seguir los pasos de Don Ferran
 
Puedo comprender que el ilustre convergente, ande estos días preocupado por el lío en que su partido se ha metido con lo del Pacto Fiscal y un soberanismo de estar por casa, que solo puede conducirles a ellos y al pueblo catalán, a uno de los desastres más absolutos socialmente hablando; y entiendo que una de sus soluciones pueda ser tirar con bala sobre la fuerza que le puede disputar el poder, y como buen nacionalista, incidir en las diferencias para ver de romper una formación que tiene muy claros sus principios y que ha sabido mantenerlos incólumes, desde su congreso fundacional.
 
Si debo reconocer sin embargo, que algunas veces y desde dentro del propio partido, quiero entender siempre movidos por la buena fe, algunos compañeros, quizás en un desmedido afán de protagonismo, lanzan públicos mensajes, o sostienen actitudes que pueden inducir a pensar en serias divergencias interiores; nada más lejos de la verdad, pues es de todos bien sabido que las puertas del PSC están siempre abiertas de par en par, para aquellos que en su madurez hayan variado posiciones y antepongan cuestión identitaria, ante la libertad, la igualdad y la solidaridad; y por el contrario, todo aquel que decide seguir militando, sabe muy bien que el partido tiene sus cauces de debate interno que acaban siempre culminando en los congresos y conferencian nacionales, donde los documentos y proposiciones que se aprueban son defendidas por todos con total unanimidad.
 
Nada van a conseguir, lanzando andanadas ni los de fuera ni los de dentro que pretendan un PSC que deje de ser profundamente socialdemócrata, ni tan solo que nos peleemos y discutamos en público, con nuestros hermanos de los otros puntos de España. En el doceavo congreso celebrado en diciembre del 2011, todo quedó absolutamente claro y nada ni nadie, conseguirá torcerlo lo más mínimo. Si alguien no se siente cómodo ya sabe lo que tiene que hacer, y  hoy con más facilidades que nunca, pues Mas y Recoder anuncian que les recibirá con los brazos abiertos, aunque a mi me cueste lo indecible imaginar a Montse Tura, Marina Geli, Joaquim Nadal o Ernest Maragall, de la mano de Artur Mas y la nueva generación convergente.