domingo, 3 de febrero de 2013

LA CORRUPCIÓN NO ES GENERAL, AUN QUE LO PAREZCA


Me decía un amigo hace unos días que ha dejado de abrir el periódico cada mañana porqué hiede; y en cierta manera debo reconocer que tiene algo de razón cuando en estos días se está poniendo de manifiesto, el tremendo error que cometimos los españoles, hace poco más de un año, cuando votando directamente o quedándonos en casa estratégicamente, le dimos confianza absoluta para gobernar al Partido Popular, y estos días descubrimos estupefactos que no solo no era trigo limpio, si no que la corrupción les salía por las orejas. Todos los medios día tras día, abren sus portadas hurgando en la porquería y añadiendo más y más pringados, hasta el punto que incluso hacerme sospechar de mi vecino de escalera y de mi amigo del alma, simpatizantes confesos del PP.
 
Hablando en serio, me parece en verdad muy y muy grave, que el presidente del gobierno no solo figure en unos apuntes como perceptor de dinero negro, por decirlo claramente, si no que en su nombre otros auxiliares que también figuran en las listas, léase María Dolores de Cospedal, declaren públicamente que esto no es verdad cuando al día siguiente, se aporta una nueva prueba de autenticidad. Lamentable francamente.
 
También me resulta chocante y demostradora de la poca categoría humana del actual presidente, que en sus comparecencias ante los españoles en el Congreso de los diputados y en la calle Génova, se dedique a lanzar su propia mierda, sobre los partidos de la oposición y en particular al PSOE, en un afán de generalizar el tema, con el fin de esconder las propias vergüenzas.
 
El Partido Socialista Obrero Español, tuvo ya hace unos años, su propio calvario de corrupción y pago bien caro por ello, aunque como dice su actual secretario general Alfredo Pérez Rubalcaba ello les sirvió para aprender una lección imborrable que les ha hecho actuar de manera bien distinta a partir de entonces, extremando las precauciones y actuando con total inflexibilidad, si algún desaprensivo comete alguna deshonestidad.
 
Por el contrario, el Partido Popular, consiguió librarse entonces de castigos por presuntas financiaciones irregulares, en base a triquiñuelas legales, cuestión que según parece, les hizo creerse poseedores del don de la impunidad, no en vano ahora estamos descubriendo, que es en pleno estallido del llamado Caso Naseiro, cuando empiezan las anotaciones del tesorero Barcenas, por cierto personaje que hasta hace una semana, su honorabilidad hizo poner la mano en el fuego al propio presidente Rajoy, y sin embargo hoy es denostado y tildado de chorizo por todos los altos cargos populares.
 
Es quizás por esta creencia de impunidad, en los altos cargos de la gran derecha española, lo que les hace actuar, aplicando estrategias más propias de entidades corporativistas que no de un partido político, con la responsabilidad de gobernar España, y con un amplio respaldo popular, otorgado hace tan solo 14 meses. Como si no, se puede interpretar que la llegada de Rajoy al poder, comporte el desmantelamiento del equipo de la Agencia Tributaria, que investigaba la trama Gürtel de financiación irregular de su partido, el apartar al juez Garzón instructor de esta causa, etc. etc.
 
Pero por encima de todo, resulta especialmente grave, al menos para el sistema democrático en general, utilizar el infantil “tu más” para tapar las propias vergüenzas; consiguiendo en los ciudadanos un efecto desmoralizador y de descontento con el sistema democrático, que al igual que en los años treinta del pasado siglo XX, les induce a pensar en que todos los partidos son iguales de corruptos y que es necesario darle un vuelco al sistema.
 
La extrema derecha fue en los años treinta, fué la gran beneficiaria, del desprestigio de la política, y personajes salva patrias, como Hitler, Mussolini o Franco, dominaron la escena durante algunos años, con las terribles consecuencias de devastación y muerte de todos sabidas. Tal parece que la extrema derecha hoy en España totalmente integrada en el Partido Popular, e incluso controlando su ideología a través de FAES, ha encontrado su filón en el desprestigio de la clase política en general entre la ciudadanía española; cuando hablas con alguien de la corrupción del PP siempre te sale con aquello de todos son iguales y el PSOE, también ha pringado; cuestión no cierta del todo pues de un tiempo a esta parte se ha venido demostrando que los socialistas, quizás por su amarga experiencia pasada, es totalmente expeditivo en echar a los que osan meter mano, con toda rapidez; al contrario del PP que los protege y ampara.
 
Observen amigos con detenimiento y se darán cuenta que una gran mayoría de nuestros políticos son gente honesta y que el problema reside en un pequeño porcentaje, y el miedo de algunos dirigentes a admitir su fracaso en la lucha contra la deshonestidad. Don Mariano por ejemplo ha preferido, amparar a los corruptos de su propio partido, antes de ser el abanderado de denunciarlos y sacarles los colores en público, aunque esto le hubiese costado el puesto.
 
Es muy importante no generalizar, pues esto favorece la extrema derecha, que agazapada, sigue esperando el momento en que el desprestigio sea tal, que el propio pueblo pida un salva patrias, que ellos con muchísimo gusto nos facilitarán, no lo duden Vds. ni un momento. Las lecciones de la historia siempre resultan provechosas amigos.     

2 comentarios:

  1. Excelente y magistral lectura de la situación. Estaba delante del teclado para hacer mi propio post en estos términos, o similares, pero lo has clavado a la perfección, así que directamente y con tu permiso paso a difundirlo a través de las redes.
    Ánimo
    Gaizka Sola
    http://ideafix.blogspot.es

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